martes, 11 de junio de 2013

Hospitalizaciones evitables y Atención Primaria

La Atención Primaria como determinante principal de la hospitalizaciones evitables.

Acaba de publicarse una revisión sistemática en el European Journal of Public Health en la que se pretende analizar la relación entre la accesibilidad a los servicios de Atención Primaria y las hospitalizaciones evitables en diferentes países y sistemas sanitarios. Las hospitalizaciones evitables se midieron a partir de los denominados ACSC (ambulatory care sensitive conditions), es decir, ingresos hospitalarios motivados por enfermedades susceptibles de ser tratadas y controladas en el nivel de la Atención Primaria; por su parte, la accesibilidad se determinó por medio de varios indicadores, unos puramente estructurales (médicos por 1000 habitantes o número de centros de atención primaria en la zona) y otros más relacionados con el funcionamiento de los procesos (consultas realizadas o acceso a programas específicos de atención primaria).


Los resultados son pobres porque hay muy poquitos estudios (solo 51 entre 1990-2010) que se hayan dedicado analizar este hecho, pero no dejan de tener alguna pequeña sorpresa. En general, se puede afirmar que existe mayoritariamente una relación inversa entre accesibilidad a la atención primaria, se mida el indicador que se mida, y los ingresos por ACSC, y esto con independencia del sistema sanitario del que se trate (sistema nacional de salud o de Beveridge como el nuestro; sistema basado en cuotas de seguro o modelo Bismack, como el alemán o el francés; o modelo puramente privado como el americano). Sorprende, sin embargo, que esta relación se de con más frecuencia en los estudios americanos (80 % de los estudios analizados) que en países con sistemas nacionales de salud (50%), si bien en estos últimos el número de estudios examinados es muy inferior (10 tan solo, frente a 38 en el caso americano).

¿A qué se debe esto?. Los autores no dan ninguna explicación al respecto. Tampoco a mi se me ocurre. No obstante, en los países como el nuestro, en los que la atención primaria tiene funciones de puerta de entrada al sistema (gatekeeper) se encontró una relación inversa entre accesibilidad y hospitalizaciones evitables en 7 de los 11 estudios analizados, pero en ninguno de ellos se detectó la asociación contraria (a más accesibilidad más hospitalizaciones evitables); mientras que en aquellos otros países en los que la atención primaria no tiene esta función, la relación deseada se daba en 22 de los 31 estudios, pero había también 5 estudios en los que se producía un incremento de las hospitalizaciones evitables. Tampoco es que sea muy significativo este dato, pero el que no se conforma es porque no quiere.

Otro hecho destacable es que los resultados de varios de los estudios se vienen abajo cuando se ajusta por el estatus socioeconómico de la población. Aunque en una zona haya más médicos de atención primaria o más centros de salud, su acción no parece llegar de igual manera a los más necesitados que al resto de la población. Y es que los pobres tienen siempre las de perder, se trate de lo que se trate y sea donde sea. No hay peor mal que ser pobre.

¿Y la principal conclusión?. Una que ya sabíamos pero que debemos insistir en ella, más aún hoy, en estos tiempos de penuria: el buen funcionamiento de la atención primaria, la buena dotación estructural de este nivel asistencial y una mayor accesibilidad a sus servicios puede evitar costes innecesarios al sistema reduciendo los ingresos hospitalarios.

Por ello, quiero expresar mi máximo reconocimiento a los profesionales de atención primaria por su labor constante, perseverante y sorda, pero tan determinante y decisiva para nuestro sistema y para la salud de nuestros ciudadanos y, sin embargo, tantas veces minusvalorada hasta por sus propios colegas especialistas, que a fuerza de ser maestros en lo suyo, les da a veces por ignorar que son también aprendices de todo lo demás.

Va por vosotros, médicos, enfermeras y resto de personal que hace posible el admirable funcionamiento de nuestra primera y más trascendental línea de contacto con los ciudadanos, con las personas, el punto en que la profesión médica toma raíz con la sociedad y se nutre de significado y sentido.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

GRACIAS POR COMENTAR